Ridley Scott nos deleita con el montaje del director en esta épica historia en las Cruzadas. Declarada por él mismo como "la película más difícil que ha hecho". Nos muestra que los cristianos no son tan buenos ni los musulmanes tan malos. Los personajes islámicos son interpretados por auténticos musulmanes. Saladino impone respeto y tolerancia. Con este montaje inédito el espectador/a entenderá todos los interrogantes que pudieron producirse con el visionado de la versión cines y que el director tuvo que acotar por motivos prácticos. Un gran historia (no exenta de las habituales licencias artísticas que se toman los directores e incluso errores históricos). Gran calidad de imagen y sonido.